«Que 300 niñas puedan desaparecer en
nuestro país y que el Gobierno y la policía digan que no se las puede encontrar
es realmente embarazoso», ha dicho a Radio Vaticano el
cardenal Onayekan, arzobispo de Abuja, capital de Nigeria, tras hacerse público
un vídeo del grupo islamista Boko Haram, reivindicando el secuestro de las
escolares raptadas hace tres semanas. Visiblemente disgustado con las
autoridades, el purpurado dijo que ahora lo verdaderamente urgente «es saber en
qué estado están estas chicas. ¿Qué tipo de abusos están sufriendo? ¡Nadie lo
sabe! Éste no es el momento de empezar con la política», ni de plantear
divisiones entre «cristianos y musulmanes», sino de encontrar a estas «chicas
jóvenes», cuyas vidas «están en peligro». Y se preguntó el cardenal: «¿Qué está
haciendo el Gobierno? Honestamente, no lo sé... Lo único que sé es que no hemos
visto resultados». Entre tanto, prosigue la oleada de atentados islamistas.
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